Me busco, incansable, en mil formas, en mil lugares, en mil personas y aficiones.
Y no me puedo quejar. Sinceramente, sé que es un insulto si me quejara.
Por eso tan sólo escribo estas líneas para mí, como siempre,
o para alguien que se deje caer por estos lares...
Últimamente me toca ser la geóloga vocacional de hace años. También soy la Chica Gamer que nunca imaginé que acabaría siendo. Soy la que devora libros, uno tras otro, y la que no para de comerse la cabeza con lo siguiente que va a crear para su pequeña burbuja. También soy esa amiga que sigue herida, que desconfía de sí misma y del miedo a volver a ser herida, casi como en una mala experiencia en relaciones amorosas pasadas. Soy la que estruja cada instante infinito. La que coge el cuaderno y no para de escribir. No para de bailar...
Soy la admiradora. Soy la admirada. Soy la espectadora y la que aplaude. La que cada día quiere descubrirse un poco más.
Seguir disfrutando de la música y de mi músico. Seguir descubriendo la ópera. Seguir valorándome gracias al valor que se dan los demás. Aplicarme las cosas positivas que veo y dejar de lamentar mi falsa desgracia. Seguir soñando. No dejar de hacerlo.
Y seguir paripeando. Y fingir que el mundo y la gente es genial. Y todos contentos.
Menuda mierda.
No hay comentarios:
Publicar un comentario